América Latina pura y dura

De la Revolución Cubana a la elección del papa Francisco – Exposición de artistas fotógrafos latinoamericanos en la Fondation Cartier de París

Amira Armenta*


 

 

El último informe sobre América Latina del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo PNUD publicado en noviembre de 2013 destaca que aunque la región presenta hoy día ejemplos de economías fuertes, democracias consolidadas e incluso algunos niveles de reducción de la pobreza, paradójicamente América Latina en su conjunto es también la región más violenta del planeta. Según el informe, al año se registran más de 100.000 homicidios, y  entre 2000 y 2010 la tasa de homicidos de la región creció 11 por ciento mientras que en el resto del mundo descendió o se estabilizó. Hay países, como Honduras, en donde la violencia es endémica.

Que la violencia es un componente importante de la realidad latinoamericana y por tanto de la imagen que se tiene de Latinoamérica en el mundo es lo primero que salta a la vista en la exposición de obras de artistas fotógrafos latinoamericanos en la Fondation Cartier de París, abierta desde el 19 de noviembre de 2013 hasta el 6 de abril de 2014. El periodo que cubren las obras va de 1960 a 2013, del año siguiente a la revolución cubana hasta nuestros días, o hasta la elección del primer papa latinoamericano de la historia, como lo resalta la cronología del catálogo. No deja de haber algo de ironía en que este papa tan carismático y de posturas reconciliadoras provenga de una región caracterizada por sus extremos.

En un recorrido a lo largo de las galerías de la Fundación Cartier es imposible escapar a las imágenes de violencia explícita o implícita de las obras. Los otros componentes manifiestos son la pobreza, la exclusión y la extrema desigualdad social y económica. En ninguna otra parte la brecha entre ricos y pobres es tan ancha. El 30 por ciento de la población vive en estado de pobreza extrema.

Casi sin excepción, los 72 artistas de 11 países latinoamericanos que exponen sus fotografías, collages, instalaciones de video, serigrafías etc. en esta exposición resaltan de un modo u otro alguno de estos aspectos. Desde la Ciudad de México hasta Buenos Aires pasando por Caracas, Bogotá, Sao Paulo, Lima ... en un ambiente de crimen, inseguridad, narcos, miedo, caos, revoluciones, imaginería religiosa, represión, dictaduras, militares, el desorden arquitectónico de las ciudades latinoamericanas, lujos extremos y miserias extremas, el amazonas, desiertos, carreteras, cárceles, perros callejeros porque aquel es un continente de perros, la ciudad y los perros, amores perros, memorias y actualidad del subdesarrollo, las crisis, los barrios populares con sus carteles publicitarios baratos de letras grandes y colores estridentes, el mantel de hule de los restaurantes de barrios de mala muerte en donde se te quedan pegados los brazos cuando comes, como decía aquella canción de Leonardo Favio.

En este escenario rudo e intenso se desarrollan cincuenta años de historia tumultuosa del continente, de inestabilidad política y económica, aparición y disolución de casi todas las guerrillas y de los regímenes militares, del surgimiento de lo que muchos han dado en llamar una ‘nueva izquierda’ con rasgos más o menos velados del viejo populismo de siempre.

La fusión de realidad (histórica y social) y expresión artística es quizás lo más fascinante de esta muestra. Se trata de un arte de claro contenido político pero sin amarres ni compromisos con modelos políticos o ideologías mesiánicas. Es una observación de la realidad que se expresa transformándose según la técnica o el estilo adoptado por el fotógrafo artista. Las obras, aunque tienen una enorme carga política,  son, como dice uno de los artistas participantes, “hechos estéticos más que políticos”. Pero también son políticos, porque estos artistas quieren que se vea la injusticia, el crimen, la violencia. En ello radica alguna forma de compromismo.  Este es tambien un arte de denuncia.

Cualquiera de las obras expuestas podría servir como ejemplo para ilustrar este ‘compromiso’. Desde imágenes y textos de fuerte impacto como “Gloria evaporada” del peruano Eduardo Villanes que reconstruye con imágenes lo que se conoció como el Caso de la Cantuta sucedido en los años de la presidencia de Fujimori, cuando un grupo paramilitar secuestró, asesinó e incineró a diez estudiantes universitarios.  En aquellos años la gente solía usar las cajas de leche Gloria, una marca de lácteos conocida en el país, para tirar la basura. Fue en estas cajas que los asesinos metieron las cenizas de los estudiantes para mandárselas a sus familiares. Gloria evaporada, como se evaporaron los estudiantes. Hasta obras aparentemente más ligeras y lúdicas como “Bocanadas”, de la argentina Graciela Sacco quien dice de su trabajo, “cuando alguien abre la boca es porque necesita algo... ¿qué necesita? Podría ser un grito, podría ser que pide de comer...”.

Para una lista de todos los participantes y el interesante video “Revuelta(s) de Fredi Casco y Renate Cosca, con entrevistas a casi todos los artistas, recomiendo este enlace a la página web del museo .

Y aunque es cierto que América Latina es más que su compleja violencia y su estridente miseria, nada más el hecho de que el continente presente las mayores tasas de homicidio en el mundo y de que no en pocos casos la violencia esté asociada directamente a situaciones de pobreza extrema y de exclusión social, hacen de éstos, aspectos característicos contundentes  insoslayables cuando se trata de darle una mirada crítica la realidad latinoamericana de las últimas décadas.

Como dicen los versos de esa canción de Chico Buarque que se escucha repetidamente en una de las salas de la exposición,

aquí en la tierra están jugando y gritan gol
hay mucho samba mucho choro y rock’n'roll
a veces llueve y otros días brilla el sol
mas yo quiero decirte que la cosa aquí está negra
es duro piedra de llevar la situación
que todos van llevando con tesón porfiadamente
que todos van bebiendo pues también sin aguardiente
no hay quien aguante la cuestión…

 

 

 

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Amira Armenta
(Colombia), tiene un máster en historia de América Latina. Trabaja en el Transnational Institute (TNI) en Ámsterdam. Escribe con alguna regularidad sobre temas de política, cultura, cine y libros.

Ha publicado dos libros de ensayos:

Een nieuwe tong

En el patio de atrás. Antiamericanismo y nueva izquierda en América Latina

 

La novela en edición digital:

Los gatos pardos de la noche (http://www.amazon.com/dp/B00BRXGM9W).

 

amiraarmenta.wordpress.com